Sí, no pocas veces en un acto mágico se utilizan elementos cristianos que en sí mismos no serían malos. Así hay libros que en mitad de una fórmula mágica, incluyen oraciones a santos. Otras fórmulas mágicas incluyen en su composición el agua bendita. Otras fórmulas indican que se haga la señal de la cruz sobre los elementos mezclados o que se recen tres padrenuestros.
Evidentemente, el uso de elementos en sí mismos buenos, no disminuye en nada el carácter mágico de una acción, ni la dota de efectividad alguna.
Padre José Antonio Fortea.