lunes, 13 de julio de 2015

EL ESCAPULARIO DE LA VIRGEN DEL CARMEN



La Devoción del Monte Carmelo se origina desde el siglo VIII antes de Cristo, cuando el profeta Elías ascendió el monte santo del Carmelo en Palestina, y comenzó la larga tradición de la vida contemplativa, de oración y penitencia.

De esto surgen los Carmelitas, que eran un grupo de ermitaños que vivían en el Monte Carmelo en Palestina. Ellos se creían ser los hijos espirituales de Elías el profeta, e imitaban su estilo de vida contemplativa. Pero no solo tenían influencia de la espiritualidad de Elías (oración y penitencia), sino que a los Carmelitas se les conocía cuando llegaron a Europa por su devoción a la Madre de Dios, ya que en ella veían el cumplimiento del ideal de Elías. Llegaron incluso a llamárseles: "Los hermanos de Nuestra Señora del Monte Carmelo".

Cuando hacían su profesión religiosa ellos se consagraban a Dios y a María, y el hábito que tomaban era en honor a la Virgen y como un recordatorio de que sus vidas le pertenecían a Ella.

Por la invasión de los serracenos los Carmelitas se vieron obligados a irse del Mt. Carmelo. Una antigua tradición nos dice que antes de partir se les apareció la Virgen mientras cantaban el Salve Regina y Ella prometió ser para ellos su Estrella del Mar.

Los Carmelitas fueron encontrando bastante oposición en los lugares que deseaban fundar. En el año 1246, nombraron a St. Simon Stock como el general de la Orden. Este sabía que si no había una intervención de la Virgen, a la orden le quedaba muy poco tiempo para sobrevivir. Simón fue a Maria a ponerle la orden bajo su amparo ya que ellos le pertenecían. En su oración la llamo "La flor del Carmelo" y la "Estrella del Mar", le suplico la protección para toda la comunidad. En respuesta a esta ferviente oración, en 1251 se le aparece la Virgen y le da el escapulario para la orden: "Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno".

¿QUÉ ES EL ESCAPULARIO CARMELITA?

Es parte del hábito de los Carmelitas y es una réplica miniatura de ese hábito. Consiste en dos piezas de tela café conectada con unas cintas y que se utiliza bajo la ropa. Una pieza debe colgar por la espalda y la otra por el frente. Junto con el rosario y la medalla milagrosa el escapulario es uno de los más importantes sacramentales marianos.

Un sacramental es un objeto religioso que la Iglesia haya instituido para motivarnos a una vida más santa, piadosa y para aumentar nuestra devoción. Los sacramentales deben mover nuestros corazones a renunciar a todo pecado incluso al venial.

Por lo tanto, el escapulario al ser un sacramental, no nos da gracias por sí mismo, sino que las gracias se nos dan por el aumento de amor a Dios, y por la verdadera contrición del pecado, al cual el sacramental nos debe motivar. Si por el uso de un sacramental crecemos en amor a Dios y en santidad, entonces recibimos gracias.

Aunque el escapulario fue dado a los carmelitas, poco a poco muchos laicos fueron sintiendo el llamado de vivir una vida más comprometida con la espiritualidad carmelita y así se comenzó la cofradía del escapulario, donde se agregaban muchos laicos por medio de la devoción a la Virgen y al uso del escapulario.

¿PORQUE LE LLAMAMOS ESCAPULARIO?

La palabra escapulario viene del Latín "scapulae" que significa "hombros". Y como el escapulario cae de los hombros es que se le ha dado este nombre.

Significado Espiritual del Escapulario

Es evidente que María quiere revelarnos de manera especial el escapulario. En las apariciones de Fátima, reporta Lucía, hoy Hermana María del Inmaculado Corazón, que en la última, la Virgen se apareció vestida con el hábito carmelita y con el escapulario en la mano. Y recordó que los verdaderos hijos de Ella lo usaran y que lo llevaran con reverencia. También que los que se consagraran a ella lo usaran como signo de dicha consagración.

El escapulario tiene 3 significados:

1) El amor y la protección maternal de María: el signo es una tela o manto pequeño. Vemos como María cuando nace Jesús lo envuelve en un manto. La Madre siempre trata de cobijar a sus hijos. Envolver en su manto es una señal muy maternal de protección y cuidado. Señal de que nos envuelve en su amor maternal. Nos hace suyos. Nos cubre de la ignominia de nuestra desnudes espiritual.

Vemos en la Biblia

*Dios cubrió con un manto a Adán y Eva después de que pecaron. (Manto signo de perdón)
*Jonás le dio su manto a David: símbolo de amistad
*Elías dio su manto a Eliseo y lo lleno de su espíritu en su partida.
*S. Pablo: revístanse de Cristo: vestirnos con el manto de sus virtudes.

2) Le pertenecemos a Ella: Llevamos una marca que nos hace sus hijos escogidos. El escapulario se convierte en el símbolo de nuestra consagración a María. Consagración: "pertenecer a Maria". Reconocer su misión maternal sobre nosotros y entregarnos a ella para dejarnos guiar, ensenar, moldear por Ella y en su corazón. Así podremos ser usados por Ella para la extensión del Reino de su Hijo.

En 1950 Papa Pio XII escribió acerca del escapulario: "que sea tu signo de consagración al Inmaculado Corazón de María, lo cual estamos particularmente necesitando en estos tiempos tan peligrosos".

3) El suave yugo de Cristo: "Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontraran alivio. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana". (Mt 11:29 30).

El escapulario simboliza ese yugo que Jesús nos invita a cargar pero que María nos ayuda a llevar.

La Promesa

"Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno".

Explicación de la Promesa:

Muchos Papas, santos y teólogos católicos han explicado que esta promesa significa que quien tenga la devoción al escapulario y lo use, recibirá de ella a la hora de la muerte: la gracia de la perseverancia en el estado de gracia o la gracia de la contrición. O sea que el escapulario no es una barita mágica que nos libra del infierno, sino que María como dispensadora de gracias, nos ayudará a morir en estado de gracia o sea sin pecado grave o morir habiendo tenido un auténtico arrepentimiento.

Testimonio: “un sacerdote de Chicago fue llamado para ir a asistir a un moribundo que había estado lejos de su fe y de los sacramentos por muchos años. El moribundo no quiso recibirlo, ni hablar con él. Pero el sacerdote insistió y le enseñó el escapulario que llevaba. Le pregunto si le permitiría ponérselo. El hombre acepto con tal que el sacerdote lo dejara en paz. Una hora más tarde el moribundo mando a llamar al sacerdote pues deseaba confesarse y morir en gracia y amistad con Dios"

El mismo día que S. Simon Stock recibió de Maria el escapulario y la promesa, él fue llamado a asistir a un moribundo que estaba desesperado. Cuando llegó puso el escapulario sobre el hombre, pidiéndole a la Virgen que mantuviera la promesa que le acababa de hacer. Inmediatamente el hombre se arrepintió, se confesó y murió en gracia de Dios"

Alerta

Los Papas y Santos han muchas veces alertado acerca de no abusar de la promesa de nuestra madre y usar el escapulario como una manera fácil de evadir la conversión. El Papa Pío XI: "aunque es cierto que la Virgen María ama de manera especial a quienes son devotos de ella, aquellos que desean tenerla como auxilio a la hora de la muerte, deben en vida ganarse dicho privilegio con una vida de rechazo al pecado y viviendo para darle honor".

Es inconcebible que alguien quien deliberadamente comete pecado, contando en la Promesa del Escapulario de salvarlo, moriría usándolo. Vivir en pecado y usar el escapulario como ancla de salvación es cometer pecado de presunción.

Testimonio: Durante la guerra civil en 1930, siete comunistas fueron sentenciados a muerte por sus crímenes. Un sacerdote Carmelita trató de prepararlos. Ellos se negaron. Después de tratar de hacerlo a través de visitas amistosas, él les pregunto: ¿me dejarían ponerles unos escapularios? seis de ellos aceptaron pero uno no. Los seis fueron a confesión excepto el séptimo que no quiso usarlo. Cuando llego el momento de la ejecución, el séptimo hombre dijo claramente que él no deseaba hablar con ningún sacerdote, aunque andaba colgado el escapulario. Finalmente, dispararon y siete hombres sin vida cayeron al suelo. Misteriosamente, un escapulario fue encontrado aproximadamente a 50 pasos de los cuerpos. Al revisar los cuerpos, seis hombres murieron con el escapulario, menos el séptimo.

El Beato Claudio de Colombiere (director de St. Margarita María) nos explica: 'tu preguntas ¿y si yo quisiera morir con mis pecados?, yo te respondo, "entonces morirás en pecado" pero no morirás con tu escapulario".

El Privilegio Sabatino: (sábado)

Este privilegio se basa en una bula o edicto que fue proclamada por el Papa Juan XXII en Marzo 3, 1322. Este privilegio le fue anunciado en una aparición que el Papa recibió de la Virgen y consiste en la liberación del purgatorio el primer sábado (día que la Iglesia ha dedicado a la Virgen) después de la muerte a través de una intercesión especial de la Virgen.

Condiciones: (para que aplique este privilegio)

1) Que usen el escapulario con fidelidad.
2) Observar castidad de acuerdo al estado de vida.
3) Rezo del oficio de la Virgen (oraciones y lecturas en honor a la Virgen) o rezar diariamente 5 décadas del rosario.

El Papa Pablo V confirmó en una proclamación oficial que se podía enseñar acerca del privilegio sabatino a todos los creyentes.

Imposición del Escapulario

El primer escapulario debe ser bendecido por un sacerdote e impuesto por el mientras dice: "recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima que por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado y que te proteja de todo mal y te lleve a la vida eterna"

San Alfonso Ligorio: "Heréticos modernos se burlan del escapulario como si fuera algo anticuado y sin sentido".

Pero todos sabemos que muchos Papas lo han aprobado y recomendado. Gregorio X fue enterrado con su escapulario. 600 años más tarde cuando abrieron su tumba, su escapulario estaba intacto.

S. Alfonso Ligorio y S. Juan Bosco; tenían una especial devoción a la Virgen del Carmen y usaban el escapulario. Cuando murieron los enterraron con sus vestiduras sacerdotales y con su escapulario. Muchos anos después cuando abrieron sus tumbas encontraron que todo era ceniza, excepto sus escapularios, estaban intactos.

Recordemos si, que el escapulario es un signo del amor y protección maternal de María y de su llamada a una vida de santidad y sin pecado.

Usar el escapulario es una respuesta de amor a la Madre que vino a darnos un regalo de su misericordia. Debemos usarlo como recordatorio que le pertenecemos a ella, que deseamos imitarla y vivir en gracia bajo su manto protector.

Fuente: corazones.org